La villa P27 se ubica en una parcela elevada con vistas a Camp de Mar. La arquitectura de la casa se integra orgánicamente en la topografía del terreno. El edificio de tres plantas aprovecha las espectaculares vistas de Mallorca al tiempo que refuerza un diálogo entre el proyecto y los espacios abiertos que lo rodean.
Terraza Balear tuvo el honor de participar en este proyecto y reflejar la experiencia arquitectónica inmersiva en el concepto de mobiliario. ¿El resultado? Un hogar que respira relajación mediterránea, sofisticación y elegancia italiana.
En esta casa de 5 dormitorios, 5 baños y 640 metros cuadrados, los muebles realzan la arquitectura en cada rincón. Los espacios abiertos de la zona de día están perfectamente conectados mediante tonos suaves que conservan un flujo interior-exterior Los reflejos azules claros se hacen eco del mar de una manera sutil y
contemporánea y las formas y volúmenes elegantes y refinados se alinean con la arquitectura de la finca en lugar de restarle protagonismo.
La zona de noche tiene mucho espacio para relajarse mientras se admiran las vistas a las montañas y al mar. Los tonos neutros vestidos con atractivas texturas cuidan la comodidad en su esencia.
Esa misma historia coherente continúa al aire libre. El patio cubierto es un oasis lleno de vegetación, que permite que la naturaleza abrace a los propietarios mientras disfrutan de su comida. Aquí, el mobiliario está en armonía con el de la terraza en el otro lado: los materiales suaves en tonos neutros se combinan con la madera.
Otro lugar destacado al aire libre está en la azotea, el lugar perfecto para disfrutar de estar en contacto pleno con la naturaleza. Todos los elementos del proyecto P27 hablan el mismo idioma, ofreciendo un enfoque homogéneo y armonioso. La simplicidad elegante se respira en cada rincón, y su estilo de diseño contribuye a una vida de calidad.